El excontable de la empresa de Urdangarin y la infanta reconoce que tuvo que incluir gastos poco ortodoxos en la cuentas de Aizoon. Cuando se lo comunicó a la secretaria de Urdangarin "la secretaria me dijo que estaba de acuerdo pero que lo metiera", señala Tejeiro.

La acusación de Manos Limpias, la única que pide prisión para la infanta Cristina, ha intentado que Tejeiro la implicara. El excontable ha sido cauto y su declaración le ha servido al fiscal para negar que jugara un papel en la consultora.

Y a la abogada del Estado para situar toda la responsabilidad en los hombros de su marido y su socio. En su tercer día declarando Tejeiro se ha revelado como poco cualificado para el puesto porque es "farmacéutico". Dice que sólo vio dos veces a la infanta, cuando fue a recoger a su marido a la oficina y cuando le invitaron al cumpleaños de Urdangarin.