Refrescos sobre obras de arte y pintura sobre edificios con significado: el Congreso de los Diputados, la sede del BBVA, el restaurante de MasterChef y, ahora, las sedes de PP y PSOE en Madrid.

Las acciones de estos activistas se han ido sucediendo en los últimos meses, terminando en muchos casos con detenidos: en este último caso, las sedes madrileñas de las dos principales formaciones políticas se despertaron el lunes teñidas de pintura negra y, detrás de esto, cinco personas detenidas. Estas cinco personas han actuado en nombre de Futuro Vegetal, una escisión radical de Extinction Rebellion, un veterano grupo activista que aboga por la resistencia civil no violenta.

Si bien algunos los acusan de violentos, desde la organización aseguran que no van a parar. "Vamos a intensificar nuestras protestas. Tenemos que cambiar nuestros hábitos", asegura a laSexta Mauricio Misquero, científico e integrante de la organización, quien pone de ejemplo la enorme "demanda de carne" detrás de la cual está la sociedad. Futuro Vegetal ha perdido la fe en la política y considera que el sistema está al borde del colapso... y que nadie hace nada por solucionarlo.

Aunque no todo el mundo critica este modelo de reivindicación. "Estas acciones y estrategias buscan mejorar el bien de todo el mundo, el bien común, la atmósfera, el clima...", asegura a la cadena el profesor de investigación del CSIC Fernando Valladares.

¿Quién está detrás de Futuro Vegetal?

"Somos un movimiento de desobediencia civil y acción directa que lucha contra la crisis climática mediante la adopción de un sistema agroalimentario basado en plantas": así se presentan en su página web.

En ella, insisten en sus argumentos para cambiar "la ética de la abundancia" así como "la forma de producir y consumir" centrándose en "la seguridad alimentaria y la redistribución de tierras". La organización surge de Extintion Rebellion y asume sus principios, aunque con ciertos matices

"Queremos quitar la careta a todos los políticos que dicen preocuparse por el medio ambiente y la habitabilidad del territorio pero siguen participando de un gobierno que financia industrias ecocidas como la cárnica", ha manifestado una de las portavoces del colectivo, según recoge un comunicado de la organización.

Las reivindicaciones de Futuro Vegetal

En uno de sus manuales, detallan cómo transformar un extintor en un lanzador de pintura, lo que han utilizado para llevar a cabo este ataque.

Su ideario pasa por luchar contra el cambio climático basando nuestra alimentación únicamente en vegetales. El colectivo afirma que están "cansadas de engaños y de falsas esperanzas" y critican que las corporaciones están dispuestas a dejar "un territorio en ruinas", acusando a los políticos como responsables del "expolio y la contaminación que las corporaciones agroalimentarias y eléctricas están haciendo de los recursos hídricos comunes".

Esta acción se enmarca dentro de la campaña de "resistencia civil no violenta" que el colectivo está dinamizando para todo el mes de abril y se da unas semanas después de que el director académico del Foro de la Economía del Agua y profesor de derecho de la Universidad de Granada, Estanislao Arana, advirtiera en la Conferencia del Agua en la ONU que en siete años unas 829.000 personas morirán en el planeta por agua y saneamiento contaminado

En otro de sus manuales dan las claves para "colapsar el tráfico de tu ciudad", una "guía práctica" en la que se explica cómo hay que organizar los comandos para parar ciudades.