Euskadi, Cantabria y Cataluña han adelantado a este viernes su "nueva normalidad", anticipándose al fin del estado de alarma el próximo domingo, caracterizada por la reducción de aforos en los espacios públicos y en la que el principal reto es evitar rebrotes del coronavirus. Además, Euskadi y Cantabria abren el tránsito intercomunitario, una medida que pensaban haber activado el pasado lunes, pero que han retrasado por los rebrotes en varios hospitales vascos.

Este escenario ha motivado que la Dirección de Tráfico del Gobierno vasco refuerce este fin de semana el control y la vigilancia en los trayectos entre provincias y comunidades. La razón es que, según las previsiones de Tráfico, unos 47.000 desplazamientos tendrán lugar entre Bizkaia y la comunidad desde este viernes y hasta el domingo, razón por la que no se recomienda viajar entre ambas comunidades este fin de semana. Una situación acrecentada además por la gran cantidad de desplazamientos que se prevén en hora punta al ser la primera jornada en la que se permite el traslado a segundas residencias en localidades cántabras después de tres meses de restricciones.

Cabe destacar que, ya en el programa Al Rojo Vivo, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, había confirmado que, una vez decaiga el estado de alarma el 21 de junio, cualquier ciudadano podría viajar a otros territorios del país. Por ello, apelaba a la "responsabilidad individual", e insistía: "Los viajes innecesarios, pues son innecesarios". En esta misma línea se expresó poco después Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), puntualizando que "es recomendable no moverse cuando no es necesario, sobre todo entre provincias, hasta que tengamos un nivel de transmisión cercano a cero".

Por su parte, el Govern catalán ha mostrado su preocupación por una operación salida sin precedentes en Cataluña con la llegada de la nueva normalidad. De esta manera, Para afrontar este previsible aumento del tráfico, los Mossos d'Esquadra desplegarán más de 700 agentes y realizarán cerca de 500 controles de tráfico en las vías catalanas hasta el domingo. Desde el Servicio Catalán de Tráfico lamentan que el fin de las restricciones de movilidad provoque "elevadas densidades de tráfico a las que los conductores se han desacostumbrado durante los meses de confinamiento" y ha pedido extremar la "precaución" en la conducción.

Estas comunidades adelantan la "nueva normalidad" 48 horas, ya que el próximo 21 de junio termina el estado de alarma y todo el país recuperará la movilidad, una situación que Galicia disfruta desde el pasado lunes, pero con cautelas, sobre todo en los lugares y actos que congregan a muchas personas.

"Velar por un verano tranquilo"

Madrid ha elaborado también su decreto, que se aprobará este viernes en el Consejo de Gobierno y en el que su presidenta, Isabel Díaz Ayuso, ha anunciado que "va a primar la libertad y la responsabilidad individual". La norma pretende "velar por un verano tranquilo" en el que los madrileños se puedan mover y recibir turismo pero "con seguridad", en una nueva etapa en la que el Gobierno regional ha reconocido estar preocupado por la reapertura del ocio nocturno por el riesgo de nuevos rebrotes.

El Consejo de Gobierno de Aragón también se reúne para aprobar la orden o decreto de "vuelta a la normalidad", que será "prudente y precavido" a la hora de conjugar los criterios de salud pública con los de reactivación de la actividad económica. La Junta de Extremadura también tiene previsto aprobar su decreto para regular el nuevo periodo.