Puigdemont dijo que abandonaría las tan recurridas metáforas de Artur Mas, pero en su primer acto público como nuevo president, ha aparcado los barcos por trenes: “Ponemos trenes en la vía no para que choquen sino para que vayan muy lejos".
El president de la Generalitat ya ha recibido dos llamadas de líderes políticos nacionales, Pablo Iglesias fue el primero, ambos comparten la idea de que "el diálogo y el buen tono son buenos para España y Cataluña frente al inmovilismo del Gobierno".
Pedro Sánchez también ha contactado con el president y se ha comprometido abordar una reforma federal de la Constitución. El líder del PSOE le ha trasladado que para su partido es prioritario resolver el problema que comparten catalanes y el resto de españoles.
Unas llamadas que reclaman desde el Partido Popular en Cataluña. Por parte del Gobierno en funciones, Puigdemont solo ha recibido una advertencia, si se salta la ley pueden aplicar el artículo 155 de la Constitución como ha dicho De Guindos: “Si se dan las circunstancias, que ojalá no ocurra, en las cuales hay que aplicarla, se hará lógicamente como ha dicho el presidente del gobierno”.
En su cuenta de Twitter, Puigdemont ha contado que también ha conversado con el lehendakari Íñigo Urkullu, y el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig.