El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, se ha comprometido en el primer pleno ordinario del Parlament a llevar a los catalanes "a las puertas de un nuevo Estado"en forma de "república independiente", a través de un proceso de año y medio "con todas las garantías, sin pasos en falso, sin improvisaciones" y abierto permanentemente al "diálogo". También ha indicado que mantendrá los servicios que son competencia de la Generalitat.

En su discurso para dar cuenta de la estructura y la composición del Govern, ha emplazado a los catalanes a "no tener duda de que el Govern aprovechará hasta la última letra de las competencias" propias para dar respuesta a la situación generada por la crisis. 

Ha añadido que el Govern también responderá al mandato de las elecciones del 27S que implica "la planificación, diseño y ejecución" de todo el trabajo que debe llevar a las puertas de un Estado independiente en forma de república, que debe funcionar mejor que cualquier Estado o autonomía haya dado hasta la fecha.