El PSOE ya prepara la investidura de Pedro Sánchez. El fracaso de Alberto Núñez Feijóo en la primera votación de su investidura ha virado las miradas al candidato socialista, que prepara una mayoría alternativa para poder revalidar su gobierno de coalición con la formación de Yolanda Díaz.

Fuentes socialistas han confirmado a laSexta que las intenciones de Ferraz pasan por acelerar las negociaciones con los grupos independentistas para poder presentarse a una investidura con los apoyos cerrados la semana después del puente del Pilar, el próximo 12 de octubre.

En Ferraz aún impera la prudencia, a apenas 24 horas de que Feijóo se someta de nuevo a la votación de la Cámara. Este viernes, le valdrá con tener más 'síes' que 'noes', sin embargo, parece poco probable que pueda ser investido tras no haber obtenido ningún apoyo más de los 172 que ya había confirmado apenas días después de las elecciones del 23 de julio.

En este marco, desde el PSOE ya mueven hilos para fraguar la investidura de Pedro Sánchez. Fuentes socialistas informaron a laSexta antes del debate de investidura de la intención de tener un gobierno consolidado aproximadamente un mes después de la investidura de Feijóo, coincidiendo en el calendario con la semana del 31 de octubre, día en e que la princesa Leonor jurará la Constitución en el Congreso de los Diputados. No obstante, fuentes del Gobierno insisten en que este extremo depende de Junts Per Catalunya, y señalan que "si se hace en octubre significará que todo va muy bien".

Fuentes socialistas indicaron en un corrillo con periodistas que "lo ideal" sería tener Gobierno para el último día de octubre, si bien el acto real se puede celebrar de igual modo con el gobierno en funciones. Apuntan así que no se puede descartar que se alargue hasta el 1 y 2 de noviembre, teniendo en cuenta que Sánchez busca salir en primera votación.

Si se cumplen los tiempos, hacia finales de octubre o principios de noviembre, el presidente en funciones, Pedro Sánchez, podría revalidar su cargo. Para ello, es preciso que el rey Felipe VI le designe para ser investido, y que obtenga los apoyos de 176 parlamentarios en los que se incluirían los diputados de ERC, PNV, EH Bildu y Junts Per Catalunya.