Entre gritos y abucheos
se ha celebrado el pleno municipal de Vigo. Los asistentes denuncian el nuevo
reglamento para las sesiones aprobado por la mayoría del PSOE y que, entre
otras cosas, restringe las protestas. "Es el reglamento más antidemocrático y
menos transparente que va a haber en este país, no entienden la democracia si
no es desde la imposición", ha apuntado Elena Muñoz, portavoz del PP.
Es la última vez que se
verán carteles de protesta porque a partir de ahora están prohibidos. Dándole la espalda al
alcalde y con cintas en la boca denuncian también la limitación de público en
los plenos. "Es para mascarar los derechos democráticos de la ciudadanía",
explica Carlos López Font, portavoz de Marea de Vigo.
También se limita el
acceso a los expedientes, algo que dicen, pondrá muchas trabas al trabajo de
los concejales. El alcalde socialista, sin embargo, defiende que la nueva
normativa es necesaria y garantiza la transparencia. "Era necesario hacer un
reglamento que hiciera respetar a los concejales, para que no nos insulten como
nos insultaron", ha explicado Abel Caballero, alcalde de Vigo. Pero ciudadanos
y la oposición hablan de autoritarismo y desprecio a la democracia.