El próximo 21 de mayo se celebrará la sesión constitutiva de las Cortes Generales que dará comienzo a la XIII legislatura. Será una ocasión sin precedentes, ya que ese día, cuatro diputados y un senador, que se encuentran en prisión preventiva por su implicación en el 'procés' independentista, tendrán que llegar escoltados a recoger sus actas.

El Tribunal Supremo autorizaba hace solo unos días a los diputados electos Oriol Junqueras, Josep Rull, Jordi Turull y Jordi Sànchez, así como al senador electo Raül Romeva, a salir de prisión para asistir a la sesión constitutiva, pero estableciendo como condiciones que estén "debidamente custodiados" y que se garantice su seguridad.

Por eso, y ante esta excepcional coyuntura, el Congreso de los Diputados ha estado trabajando en un dispositivo especial para garantizar la seguridad de los presos que obtuvieron escaños el 28A y, a la vez, evitar que su presencia en el Pleno perturbe el desarrollo de la sesión.

Según ha podido saber laSexta, los diputados electos serán trasladados desde la cárcel de Soto del Real hasta el Congreso de los Diputados en un coche camuflado de la Guardia Civil.

Una vez lleguen al Congreso, su custodia dependerá única y exclusivamente de la Policía de la Cámara. Allí les recibirán la Comisaría y el inspector jefe del Congreso, que serán los encargados de explicarles cómo se desarrollará su estancia durante las siguientes horas.

Eso sí, en cuanto lleguen a la Cámara Baja se les retirarán las esposas, de tal forma que no les veremos esposados en ningún momento, para preservar su dignidad.

Sin embargo, persiste la duda de cómo llegarán al hemiciclo y si para ello pasarán por el patio del Congreso y el pasillo de acceso. En el auto en el que autorizaba su salida temporal de prisión, el juez Manuel Marchena, que preside el juicio del 'procés' en el Tribunal Supremo, dejaba claro que los presos podrían acudir a la sesión constitutiva únicamente para lo imprescindible, por lo que no parece probable que se les dé la oportunidad de dar declaraciones a la prensa.

Así, otra posibilidad es que entren en coche por la rampa del Congreso y de ahí directamente al parking, donde les esperarían la Comisaría y el inspector, sin pasar ante los medios, o incluso que entren a pie por la puerta de acceso de la calle Zorrilla, situada en la fachada posterior del edificio.

Una vez dentro del hemiciclo, no habrá policías uniformados. Allí, en principio, los diputados tendrán libertad de movimientos, aunque habrá agentes de paisano situados cerca de las puertas, llevando a cabo una vigilancia discreta.

Por otra parte, para poder tomar posesión de sus escaños, los diputados electos tienen que presentar sus credenciales antes del lunes 20 por la tarde y, para que los presos puedan hacerlo, el magistrado Marchena tendría también que darles permiso. No obstante, desde el Congreso aseguran que se les permitirá hacerlo el mismo martes 21, antes de que empiece la sesión constitutiva.