La Dirección General de Salud Pública del Gobierno de Aragón ha detectado en 24 horas un total de 45 nuevos casos en las comarcas aragonesas que han tenido que desescalar a la fase 2 por la aparición de brotes de coronavirus, de las que 25 se han diagnosticado en las comarcas oscenses de Bajo Cinca, Cinca Medio, La Litera y 20 en la del Bajo Aragón-Caspe.

Desde Salud Pública informan de que se están estudiando los nuevos casos para establecer su vínculo con los ya conocidos, surgidos hace poco más de una semana en estas comarcas, relacionados con personas migrantes que trabajan en la recogida de la fruta.

De este modo, las comarcas aragonesas que tuvieron que desescalar de la fase 3 a la 2 acumulan, según datos provisionales, alrededor de 270 positivos.

Asimismo, el Gobierno regional ha comunicado que ha detectado 75 nuevos casos en toda la comunidad autónoma (61 de ellos asintomáticos).

En Monzón, Huesca, en un centro de personas con discapacidad, un trabajador del turno de noche dio positivo en coronavirus. Se hicieron pruebas a todos los contactos (17 usuarios y 4 trabajadores más). Los resultados de esas pruebas dieron tres usuarios positivos y el resto negativo.

Ante esto, se hicieron las pruebas a todo el centro (92 usuarios y 45 trabajadores) y de ahí salieron dos usuarios más y nueve trabajadores. En total, hay 10 trabajadores y cinco usuarios contagiados, todos asintomáticos. Los trabajadores pasan la cuarentena en su casa y los usuarios aislados en una zona del centro.

Este viernes, la consejera de Sanidad del Gobierno de Aragón, Sira Repollés, ha destacado la eficacia de los modelos "tipo comando" que se han puesto a funcionar para frenar la expansión de la covid-19 en estas cuatro comarcas aragonesas y que es una de los instrumentos para identificar precozmente los casos sospechosos de covid-19 y los contactos.

Para Repollés, el modelo "tipo comando" es el "acertado para contextos dinámicos en los que hay que dar una respuesta rápida y flexible" con equipos de refuerzo de centros de salud de otras áreas sanitarias y de equipos de control epidemiológicos, como los que se han puesto en Bajo Aragón Caspe, uno de los puntos del rebrote.