Pedro Sánchez tiene 82 días para intentar ser investido como presidente del Gobierno. En ese periodo, Carles Puigdemont ha pedido que se tramite una ley de amnistía exprés que dé paso a negociar un "acuerdo histórico" que resuelva el conflicto en Cataluña.

"Hoy no existen las condiciones para llegar a ese acuerdo; si hay interés, esas condiciones se deberían crear", ha comentado, defendiendo que "solo un referéndum acordado con el Estado español" sería capaz de "sustituir el mandato del 1-O".

Pero, ¿sería posible hacer lo que pide Puigdemont? ¿Hay tiempo suficiente para tramitar una ley de amnistía? La realidad es que sí, que en esos 82 días se puede tramitar de urgencia una ley de esas características.

Si las fuerzas progresistas quieren llevar a cabo este proceso, podrían tener todo aprobado en un máximo de un mes y 20 días. Donde sí podría demorarse es en el Senado, donde el PP tiene mayoría absoluta, pero la tramitación urgente de las iniciativas en la Cámara Alta está tasada, teniendo que producirse en un plazo máximo de 20 días.

Además de esta ley de amnistía, Puigdemont ha dado otras condiciones para negociar la investidura de Sánchez, las cuales considera que no son contrarias a la Constitución:

  • Reconocimiento y respeto a la legitimidad democrática del independentismo.
  • Abandono de la vía judicial contra los independentistas. "Debe ser un abandono permanente", ha pedido.
  • Creación de un mecanismo de verificación que aporte garantías de los compromisos que se puedan alcanzar. "La falta de confianza de las partes lo hace necesario", añade.
  • Recuerda el compromiso para que el catalán sea reconocido en Europa.
  • El marco de cuáles son los límites para una negociación.

"Está al alcance del gobierno español que inicie ley de amnistía, pero también es responsabilidad del gobierno en funciones, a través de la Fiscalía y de la abogacía del Estado, y se tiene que hacer para reparar una injusticia, no para olvidar", ha asegurado.