En un comunicado conjunto hecho público tras la conversación de unos 20 minutos, Iglesias ha insistido en la importancia de "no dilatar más en el tiempo" la formación del próximo Gobierno y el secretario general socialista le ha dicho que, antes del reparto de puestos en el ejecutivo, tienen que llegar a un acuerdo sobre las políticas que impulsarán desde esta hipotética coalición.

En la conversación, Sánchez ha mostrado a su interlocutor su "desagrado" por la forma en que pidió una vicepresidencia y varios ministerios estratégicos como condición para firmar un pacto. Iglesias ha insistido en que, "por encima de todo", lo importante es que haya un "gobierno de progreso".

Sánchez, por su parte, le ha dicho que él está dispuesto a hablar con todas las fuerzas políticas que quieran "un cambio progresista y reformista", aunque, en línea con lo anterior, ha pedido que primero se hablen de políticas y luego de sillones.

Iglesias también apuesta por el diálogo "con las fuerzas que no comparten la hoja de ruta del PP" y subraya la importancia de "no dilatar más en el tiempo" la alternativa al Gobierno de Mariano Rajoy. Además, insiste en que el ejecutivo presidido por Pedro Sánchez tiene que contar con ministros de Podemos e IU con un peso proporcional a los resultados del 20 de diciembre.

La prioridad, según Iglesias, es apostar por "políticas económicas redistributivas" y por la "plurinacionalidad", eludiendo hacer mención explícita al referéndum que defienden desde su partido como respuesta al proceso independentista en Cataluña.

Sánchez ha mostrado su "indignación" por el uso partidista que ha hecho el Partido Popular de las instituciones tras declinar el encargo del rey para presentar la candidatura de Mariano Rajoy en el pleno de investidura del Congreso de los Diputados. "Se puede dar un paso o al frente o atrás, pero nunca al lado", ha defendido.