Los ocho firmantes de la carta piden a la gestora del PSOE que no obligue a los 84 diputados socialistas a abstenerse ante la investidura de Mariano Rajoy. Así, proponen la abstención técnica de tan sólo 11 diputados; los que Rajoy necesitaría para salvar la investidura.

Creen que esta solución haría que el coste para el Partido Socialista fuera menor y consideran que ayudaría a superar la división actual. Entre los ocho líderes regionales socialistas que firman la carta no hay ningún presidente autonómico, salvo la balear Francina Armengol.