El ex número 2 de Interior con el PP Francisco Martínez se ha acogido a su derecho a no declarar como investigado tras comparecer ante el juez del caso Villarejo que le había citado en la pieza Kitchen, en la que se investiga un supuesto espionaje al extesorero del PP Luis Bárcenas.

Según han informado fuentes jurídicas a laSexta, Martínez ha decidido no prestar declaración y tampoco ha contestado a las preguntas de los periodistas a su salida a la Audiencia Nacional. El exsecretario de Interior es el primer cargo político que es citado en esta causa que investiga un operativo ilegal que se habría sufragado con fondos reservados y cuyo objetivo sería sustraer información sensible del PP a Bárcenas.

Francisco Martínez ha sido citado a declarar por los delitos de malversación, prevaricación y revelación de secretos.

Francisco Martínez está imputado por los presuntos delitos de malversación, prevaricacion y revelación de secretos. El jueves emitió un comunicado en el que pedía respeto a la presunción de inocencia y aseguraba que siempre trabajó con "respeto a la ley".

El excomisario García Castaño se ratifica

Además de Martínez, el juez también ha citado como investigado en esta misma pieza al excomisario Enrique García Castaño, alias El Gordo, exjefe de la Unidad Central de Apoyo Operativo (UCAO) de la Policía Nacional, quien sí se ha mostrado dispuesto a prestar de nuevo declaración ante el juez Manuel García Castellón.

Fuentes presentes en el interrogatorio aseguran a laSexta que se ha ratificado en su declaración anterior. Ha asegurado que le entregó a Francisco Martínez personalmente un pendrive con el volcado de losmóviles de Bárcenasy un ordenador en dependencias del ministerio del interior.

García Castaño se ratifica y asegura que entregó a Martínez un pendrive con el volcado de los móviles de Bárcenas.

En una de sus últimas citaciones, el Gordo ofreció detalles sobre la operación Kitchen y aportó los nombres de los policías que le ayudaron en la clonación de los móviles de Bárcenas, cuyo contenido se grabó en un "pendrive" que, según su versión, él mismo entregó a Francisco Martínez.

En esa operación, según relató, colaboró con él el que fuera chófer del extesorero, también investigado en esta causa y que, según la investigación, supuestamente cobró 48.000 euros de fondos reservados por actuar como confidente policial.