José Luis Huerta, exgerente de la empresa Waiter Music, era el empresario de cabecera de Francisco Granados para organizar todo tipo de festejos.

Según publica la Cadena Ser, Huerta llegó a financiar eventos del PP y actos particulares de varios de sus alcaldes en Madrid, como fiestas y comuniones.

En su declaración ante el juez, relata ante el juez cómo los dirigentes del PP le exigían la financiación de actos del partido y particulares por las adjudicaciones públicas que le habían concedido.

Sin embargo, y tras la época de bonanza vivida al lado de los populares, la empresa de José Luis Huerta quebró tras estallar el caso Púnica. Ahora, según le ha dicho al juez, trabaja de camarero por 1.200 euros al mes.