Muere con coronavirus el exministro de Justicia socialista y Defensor del Pueblo Enrique Múgica a los 88 años. El PSOE ha informado "con enorme tristeza" de su fallecimiento a través de las redes sociales.

En un tuit el PSOE alaba al político vasco como "un gran defensor de la democracia, jurista y político, precursor y una de las personalidades más relevantes del socialismo".

 

Abogado, exministro de Justicia y también defensor del Pueblo, Enrique Múgica nació en San Sebastián en 20 de febrero 1932, se afilió inicialmente en 1953 al Partido Comunista y estuvo preso en la cárcel de Carabanchel por la represión franquista.

A causa de su actividad política volvió a ser detenido en 1959 y en 1962. Ese año fue condenado en Consejo de Guerra a seis años de prisión. Cumplió 22 meses de condena.

Durante su estancia en la cárcel abandonó el PCE por discrepancias ideológicas, y se afilió al PSOE. Pasaría cuatro veces por la cárcel lo que sumó dos años y medio de prisión.

Miembro de la Comisión Ejecutiva socialista desde 1967, en 1974 fue elegido secretario de Coordinación del PSOE en el Congreso de Suresnes y en representación de su partido, formó parte activa de la Plataforma de Convergencia Democrática (1974-76) y de la Coordinadora Democrática, órgano unitario de oposición al franquismo. En el Congreso de 1976 y en el Extraordinario de septiembre de 1979 fue elegido secretario de Relaciones Políticas de la Ejecutiva Federal socialista.

En las primeras elecciones democráticas, del 1 de marzo de 1977, fue elegido diputado del PSOE por Guipúzcoa, renovando su escaño por el mismo partido y la misma circunscripción en los sucesivos comicios hasta el año 2000.

El 8 de julio de 1988, fue nombrado ministro de Justicia en el Gobierno de Felipe González, sustituyendo a Fernando Ledesma. Múgica ocupó el cargo hasta marzo de 1991. El 6 de febrero de 1996, en plena campaña para las elecciones del 3 de marzo, ETA asesinó a su hermano Fernado Múgica.

En las elecciones de marzo de 2000 volvió a ser elegido diputado socialista, pero fue propuesto por el PP para el cargo de Defensor del Pueblo y el 15 de junio de 2000 tomó posesión, tras obtener el apoyo del Parlamento. Abandonó por este nombramiento la militancia socialista y renunció a su escaño en el que fue sustituido por Elvira Cortajarena.

El 30 de junio de 2010, coincidiendo con la expiración de su segundo mandato, cesó en el cargo y fue sustituido de forma interina por María Luisa Cava de Llano.