Ha llegado muy temprano para no encontrarse con ellos. Los preferentistas querían ver bien a Blesa y desahogarse. Pero como fuera no ha sido posible, lo han intentado dentro.

El juez ha multado con 100 euros a una preferentista por interrumpir a Blesa y ha expulsado a todos los demás. Una decisión que ha sido cuestionada por el juez acusado, Elpidio José Silva, que incluso ha pedido salir de la sala.

Pero el juez no se lo ha permitido. En opinión de Silva, el interrogatorio a Blesa estaba siendo demasiado amable. El expresidente de Caja Madrid ha dicho que su paso por la cárcel ha hecho daño a su familia y ha acabado con su prestigio profesional.

Pero a pesar de todo el sufrimiento, Blesa ha asegurado al juez que no tiene ningún problema con Silva. Blesa ha explicado su visión de lo sucedido con el juez Silva haciendo símiles gastronómicos y ha asegurado que desde el principio sospechó que el juez no estaba siendo imparcial con él.

En total, media hora de declaración llena de interrupciones y que ha terminado, a la salida entre abucheos.