Autogobierno, que no autodeterminación. Sobre una mayor autonomía para Cataluña pivota la posición negociadora del Gobierno con la Generalitat y por ello Pedro Sánchez propone dialogar sobre "la financiación, las cuestiones que tienen que ver con las leyes sociales o con las infraestructuras".

El Ejecutivo estudia varias vías de actuación para ceder más capacidad de decisión a Cataluña. Para Miguel Pérez Moneo, profesor de Derecho Constitucional de la Universidad de Barcelona, "puede que la clave no sea incrementar el número de competencias de la Comunidad, sino integrar más a Cataluña en los procesos de adopción de decisiones estatales".

Una de opciones sería la modificación de la legislación ordinaria en materias como Sanidad, Educación o Urbanismo. Otro de los medios sería la modificación de leyes orgánicas, y es que según el Gobierno, sigue estando encima de la mesa la posibilidad incluir algunos de los contenidos del Estatut de 2006, que tumbó el Constitucional más por la forma que por el fondo. Se podría debatir, por ejemplo, la creación de un órgano judicial específico para Cataluña.

Y luego estaría la oferta en forma de referéndum sin afectar a la soberanía nacional. "Una de las vías es la reforma de la Constitución, otra es la posibilidad de reforma del Estatuto de Cataluña", explica Pérez Moneo.

Para los independentistas, hoy por hoy el escenario del Estatut está superado porque es un debate que "ya se tuvo hace 10 años", según dice Elsa Artadi. Para ellos, la independencia sigue siendo el objetivo inamovible, aunque desde ERC, Joan Tardà defiende que no se puede imponer a la mitad de Cataluña.