La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, se ha incorporado al trabajo en su despacho del Palacio de Cibeles para retomar su "actividad normal" dentro de lo que le permita la fractura de tobillo que sufrió al inicio de las vacaciones navideñas y que le obliga a ir en silla de ruedas.

Según han informado desde la Alcaldía de la capital, la exjueza, de 74 años, está "animada" y "totalmente activa" pese a que ha tenido que despejar su agenda. Manuela Carmena fue operada el pasado 26 de diciembre de la fractura de tobillo que sufrió el 21 al caerse en su domicilio, y tuvo que regresar al hospital unos días más tarde por una infección que la obligó a estar ingresada en Nochevieja.

Tras recibir el alta el día 2, la regidora acudió en su silla de ruedas a la cabalgata de los Reyes Magos del pasado 5 de enero. También ha ido a la sede del Ayuntamiento "activa y animada" aunque tendrá que acudir a las revisiones médicas y trabajar de una forma más pausada por su estado de salud. Carmena recibió el alta hospitalaria pero en ningún momento ha estado de baja médica a efectos laborales, según han concretado desde el Consistorio.