La exalcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, ha explicado en su nuevo libro 'La Joven Política' las claves de lo que ve como problemas fundamentales de la cultura democrática en nuestro país. En una entrevista con Europa Press, Carmena ha asegurado que "el nivel de agresividad en el discurso público y la enquistada estructura de partidos políticos son una amenaza para la democracia".

En este sentido, Carmena ha contextualizado el triunfo electoral de Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid como el resultado de un ambiente político que no ofrece auténticas alternativas a la descalificación verbal y al pensamiento de bloque. "Los réditos políticos que da la confrontación tiene que ver con que es la única oferta que se tiene en el mercado", ha observado.

La jueza considera que la posición de la ciudadanía en relación con la confrontación política se expresa en el progresivo distanciamiento que se está produciendo entre la gente y los partidos políticos. "La sociedad está harta de esto pero no puede elegir otra cosa", ha expresado, "porque el menú es idéntico independientemente de que se trate de una etiqueta electoral u otra".

Carmena ha afirmado que los posicionamientos de la presidenta de la Comunidad de Madrid están muy cercanos a los de Vox, señalando el aparente "tándem" que constituyen las dos formaciones de derechas en la Comunidad de Madrid. "Ese resurgir de la extrema derecha indica que tenemos una democracia que no tiene la calidad que debería tener", ha lamentado.

En este sentido, la autora de 'La Joven Política' ha señalado el escenario político alemán, en particular al Bundestag en Berlín, donde las intervenciones de los diputados no alcanzan la violencia verbal de nuestro país. "El acto de despedida de la señora Merkel, y el acto de bienvenida del señor Schölz indica que ellos han aceptado que la democracia, fundamentalmente, es un proceso de diálogo entre unos y otros".

La ex alcaldesa de la capital ve la raíz de esta violencia institucional en el funcionamiento de los partidos en nuestro país, hasta el punto de afirmar que "los partidos políticos tienen que reformarse".

Para la candidata de Más Madrid a la alcaldía en 2019, los partidos deberían dejar de lado sus intentos de diferenciarse entre sí y adoptar un rol propositivo y "poniendo proyectos en el debate público".

"De lo que se trata es de que los partidos trabajen por proyectos en los que quepan opiniones de personas de otros partidos", ha ofrecido. "El punto más importante de la reforma de los partidos es que se abran, que no estén vinculados al proceso constante de identificarse diferenciándose a través del insulto a los otros".

Además, la jueza ha observado la necesidad de generar nuevas estructuras políticas al margen de los partidos que tengan un rol más dinámico en la participación democrática.

Carmena ha considerado el papel de las plataformas frente a las agrupaciones electorales, decantándose por las últimas ya que, según ha explicado, "las plataformas no tienen una entidad jurídica". "Tú no te puedes presentar con una plataforma, te obligan a que esa plataforma la enmarques en un partido instrumental", ha continuado, "el riesgo es que ese partido acabe dejando de ser instrumental y sea fundamental".

Otra de las vías que ha propuesto para mejorar la salud democrática y la participación ciudadana en la política es la representación por sorteo. "La selección de ciudadanos al azar se ha demostrado muy útil en instituciones a las que estamos muy acostumbrados, que respetamos y que consideramos que son correctas", ha argumentado, "como es el propio proceso electoral".

En este sentido la exalcaldesa ha señalado como ejemplos la constitución de mesas electorales durante las elecciones, gracias a las cuales se producen procesos electorales legítimos, y la selección de jurados en procesos judiciales. "El jurado es una institución que cuando se implantó en España dio lugar a mucho debate...ahora está completamente asentada", ha observado.

En busca de "organizaciones transversales"

En este sentido, Carmena ha considerado la agrupación electoral como el camino a seguir para la futura candidatura de Yolanda Díaz a las elecciones generales, afirmando que esa debería de haber sido la fórmula elegida en su segunda candidatura a la alcaldía de Madrid. La exalcaldesa ha indicado que a través de mecanismos como el crowdfunding se puede hacer viable una agrupación electoral "que no sea de ningún partido, sino que sea de verdad de los electores que forman la agrupación".

Por otro lado, la que fuera primera edil del Ayuntamiento de Madrid ha lamentado la escisión dentro del grupo municipal de Más Madrid pero ha afirmado que no la considera "dramática". Siguiendo con la tesis de su libro, Carmena ha achacado esta ruptura al modelo caduco de partidos afirmando que responde a que "no acabamos de encontrar las organizaciones de las estructuras políticas que necesitamos. Cuando estamos en un proceso de cambio nada está consolidado".

No puede ser que alguien diga una barbaridad y que la única alternativa sea que se retire

Manuela Carmena

"No acabamos de encontrar organizaciones transversales que puedan incorporar a muchas personas con intereses de realizar una actividad política muy encaminada a lograr proyectos concretos y no tanto estructuras clásicas de poder de 'quítate tú para que me ponga yo'", ha compartido.

Carmena ha puesto también como ejemplo del mal funcionamiento del sistema de partidos lo sucedido con Madrid Central, la zona de bajas emisiones que desarrolló durante su paso por la alcaldía y contra la que el actual regidor cargó durante la campaña de 2019.

"El que se fuera a las elecciones municipales prometiendo que al día siguiente desaparecía ese proyecto que nosotros hicimos", ha explicado, "y que sin embargo no sólo se haya mantenido sino que -dentro de las informaciones que tengo- sólo se le haya cambiado el nombre, indica el fallo que tiene nuestro sistema político".

La anterior regidora del consistorio de la capital apuesta además por instaurar un código deontológico que acarree sanciones para los representantes que descalifiquen o mientan. "Yo creo que hay una necesidad sentida: no puede ser que alguien dice una barbaridad, te llama bruja, te llama traidor, te llama ladrón, y que la única alternativa sea que se retire. No, eso no se puede tolerar, eso tiene que tener una sanción", ha reivindicado.