Desde primera hora de la mañana, la imagen en decenas de ayuntamientos de nuestro país era la de agentes de la UDEF entrando en dependencias municipales, custodiando sus puertas y registrando sus despachos en el marco de la 'operación Enredadera'.

Investigan el presunto amaño de contratos públicos a la empresa 'Gespol', una filial del grupo Sacyr que habría recibido, a cambio de comisiones, adjudicaciones de contratos relacionados con la seguridad vial, como la señalización de semáforos o la gestión de multas.

Un total de 580 policías se han desplegado por más de 40 municipios principalmente de Madrid, Castilla León y Cataluña y registran una veintena de ayuntamientos controlados por PP, PSOE y Ciudadanos.

Algunos de ellos son los de Astorga, en León, o el de Fuenlabrada, en Madrid, donde habrían detenido a su jefe de Policía, José Francisco Cano. Detenido también a las 7.00 horas José Luis Ulibarri, un empresario de León ya pendiente de ser juzgado en una de las piezas de Gürtel.

Nada más saltar la noticia, Ciudadanos advertía de que no le temblará el pulso con la corrupción y que "habrá expulsiones". De hecho, ya ha suspendido de militancia a tres miembros de su partido implicados, entre los que se encuentra el alcalde de Arroyomolinos, Carlos Ruipérez, que gobierna el municipio madrileño desde 2015.

Por su parte, Sacyr ha anunciado que ha abierto una investigación para confirmar si ha habido alguna actuación irregular.