El presidente de Ausbanc se propuso chantajear a Bankia y, según la UDEF, lo consiguió. En 2013, Luis Pineda presentó una demanda contra la entidad, pero decidió retirarla, como explica en un correo enviado a su directora de Comunicación.

"A tenor de lo hablado y de mi confianza en ti, Bankia y el presidente, he dado instrucciones para que se presente desistimiento", escribió Pineda a Amalia Blanco, dirigente de Comunicación del grupo bancario. El trato era simple, y así lo explica Pineda en otro correo.

"Solución, te giro una factura por publicidad de Dinero y Salud (revista de Ausbanc) de 40.000 para 2014, y otra de 45.000 para CONSUMERALIA en 2014. Seré condenado en costas por su señoría (espero que no me las reclaméis)". En total, le ingresaron unos 102.000 euros, cantidad que, según la UDEF, coincide con la que reclamaba judicialmente Pineda.

Sin embargo, hay más: en un correo entre empleados de Ausbanc y de Bankia se pone cifra a los pagos de 2014 y 2015: casi un millón de euros a cambio, presuntamente, de retirar demandas y hablar bien de la entidad. Según la UDEF era una práctica habitual por parte de Pineda, y en su lista de chantajeados hay al menos ocho bancos y cajas, incluido el Santander.

Pineda y el también investigado Miguel Bernad, de Manos Limpias, pidieron, presuntamente, a Ana Patricia Botín 230.000 euros para frenar una denuncia rocambolesca: que su padre Emilio Botín había sido, según ellos, asesinado.