El PSOE quiere una doble pirueta: evitar terceras elecciones y, a la vez, impedir que se les señale como los permisores de un nuevo gobierno del PP.

Mantener el 'no' a Rajoy abocaría a las urnas y es lo primero, dicen en la gestora, a descartar aunque algunos, sobre todo en el PSC, insistan en "no abstenerse a la investidura de Rajoy".

Otra fórmula sugerida por algunos socialistas: libertad de voto para que cada diputado decida si facilita o no una eventual investidura de Rajoy.

Más opciones. Ésta con escasas posibilidades: que el PSOE cambie en bloque del 'no' a la abstención. Las diferencias internas chocan con este viraje. "Lo que preferiría la gestora es que el grupo parlamentario votara unido la abstención a Mariano Rajoy, pero en este momento no es posible", apunta la periodista Lucía Méndez.

A falta de una abstención total, se podría plantear una abstención parcial. Once diputados socialistas serían suficientes para el desbloqueo.

Una versión de la abstención podría ser la ausencia en la votación de varios socialistas. Así los 'síes' superarían a los 'noes'. "Sería una fórmula vergonzante y creo que tampoco gustaría a la dirección. Es muy poco serio", explica Méndez.

Fuera del PSOE hay otra posibilidad. Implicar al PNV para que sea él quien se olvide del 'no' y permita a Rajoy formar gobierno. Todas las hipótesis están sobre la mesa y será el Comité Federal socialista quien tendrá la última palabra.