La directora general de Salud Pública, Yolanda Fuentes, y el portavoz del recién formado Grupo Covid, Emilio Bouza, han sido las otras dos personas del Gobierno de Ayuso que han presentado su dimisión durante la gestión de la pandemia del coronavirus.

La primera llegó a los dos meses de ser declarada la pandemia, en mayo, cuando las desavenencias sobre si pasar o no a la primera fase de la desescaldada sacudieron los consensos en la consejería de Sanidad.

Enrique Ruiz Escudero defendía entonces que la Comunidad de Madrid tenia la capacidad asistencial para avanzar a la fase 1 del plan de desescalada, algo que Fuentes, que se encontraba al frente del equipo de técnicos, se oponía.

La región solicitó igualmente el cambio de fase y ella dimitió al día siguiente. Hace una semana, tras conocerse la otra sonada dimisión del Gobierno de Ayuso, publicaba un mensaje que contaba con la famosa escena del hundimiento del Titanic a la vez que deseaba buena suerte a los gestores de la crisis sanitaria.

Y es que fue Emilio Bouza la segunda persona que dejó su cargo. El portavoz del grupo de coordinación entre los gobiernos regional y el central presentaba su dimisión solo 48 horas después de ser nombrado.

"Las circunstancias que he presenciado en los dos días siguientes, junto con contemplación de las ruedas de prensa simultáneas el pasado 25, me obligan a renunciar y declinar el ofrecimiento", aseguraba en su carta de renuncia.

Con la marcha del consejero de Políticas Sociales, se consuma la tercera dimisión en seis meses, pero los desacuerdos dentro del Ejecutivo de Ayuso no se han quedado ahí. También en cuestión de horas, la presidenta madrileña llegó a enmendar en público a su viceconsejero de Sanidad.

Y en la última semana, las discrepancias las aireaba su vicepresidente a cuenta de las negociaciones con el Gobierno central, aunque este viernes descartaba la ruptura de la coalición.