Eran pasadas las 15:00
horas de la tarde cuando los agentes de la Policía Nacional abandonaban el
Instituto de Estadística catalán. Los investigadores habían llegado a las 9:30
horas de la mañana. Pero lo que ha empezado siendo una petición de información,
se ha convertido en un registro en toda regla ante la resistencia de los
responsables del Idescat a entregar la información requerida por el juez.
Finalmente, los policías
estado dentro casi seis horas en las que han intervenido abundante documentación. Según fuentes de la
Policía, se han llevado correos electrónicos, documentos de los investigados,
de los responsables del censo, así como el registro de todos los accesos que se
han hecho a la base de datos censal.
Su objetivo era encontrar
pruebas de que el censo que usó la Generalitat para la votación del 1 de
octubre, la conocida como plataforma Cerdá, salió de allí. "Esa plataforma es de donde habrían salido
todos los datos y lo que están haciendo es cotejar los datos encontrados en
mesas electorales y en la documentación intervenida si coincide con las bases
de datos del Idescat", explica Manuel Marlasca, jefe de investigación de
laSexta Noticias.
Algo que ya han
confesado varios de los investigados en la causa. El juzgado de Instrucción
número 13 de Barcelona ha sido el que ha ordenado el registro: sospecha que el
DNI con los datos de millones de ciudadanos se obtuvo de forma fraudulenta.
De confirmarse,
estaríamos ante un supuesto delito de descubrimiento y revelación de secretos
penado con hasta cinco años de cárcel y 12 de inhabilitación.