El levantamiento del control financiero sobre la Generalitat ha provocado una oleada de reacciones. En el PP le acusan de hacer pactos secretos con los independentistas: "Estamos viendo los pactos oscuros, los que no nos han explicado con los independentistas" ha defendido la exministra Dolors Montserrat.

El levantamiento del control de las cuentas tampoco ha gustado a Ciudadanos que denuncian que premien al independentismo: "Nos parece increíble que el señor Sánchez le premie levantando un control que se puso mucho antes del 155" ha asegurado Inés Arrimadas.

Podemos sí celebra el gesto: "Empezando a transitar el camino que nosotros llevamos diciendo un año que hay que transitar que es el de rebajar la tensión territorial" ha dicho Pablo Echenique. Y desde el PNV valoran el cambio de actitud que se ve en el Gobierno de Pedro Sánchez: "Se han producido algunas actuaciones que permiten adivinar un cambio de actitud" ha defendido Josu Erkoreka.

En la CUP aclaran que de concesiones nada, que se trata de cumplir con lo pactado y van más allá. Advierten al nuevo gobierno que es necesario avanzar con una agenda de ruptura: "Para poder afrontar un proceso constituyente, es necesario avanzar en una agenda de ruptura con el Estado español. Será necesario unilateralidad y desobediencia" dice Carles Riera. Porque el levantamiento de este control financiero estaba vinculado al 155.