Los partidos afrontan los 15 días de la nueva campaña electoralcasi como una segunda vuelta de las elecciones generales. Así, mientras unos intentarán revalidar su resultado, otros quieren ganar tiempo.

Quien más se juega es Pablo Casado, que necesita mejorar el mal resultado obtenido en las urnas el 28 de abril. El expresidente Mariano Rajoy, al que apenas vimos durante la anterior campaña, ha reaparecido en el primer día de campaña y ha defendido que el partido siempre ha estado en el centro.

En un acto del PP en Zamora, el expresidente ha defendido que "el PP siempre ha estado en el mismo sitio" y ha sostenido que el partido ahora mira hacia al futuro.

En ese mismo mitin, el que fuera su coordinador general y senador electo del PP, Fernando Martínez-Maíllo, ha señalado que "el PP es mucho más que Génova" y ha indicado que Rajoy "desde su moderación va a ayudar mucho".

La reaparición del expresidente es la prueba del golpe de timón de Casado tras el derrumbe del PP el 28A, una implicación que no se limitará a este mitin, ya que el expresidente, prácticamente desaparecido en la campaña de las generales, participará en varios actos de las autonómicas y municipales, sustituyendo a un José María Aznar que desaparece.

Un giro al centro que, según Casado, jamás abandonaron, su principal mensaje para esta campaña. "El PP lleva 40 años centrado", ha defendido. Una ruta de la que, dice ahora, no hay que desviarse. "Sin mirar a izquierda ni a derecha, hay que mirar a la carretera, a esa autopista de progreso".

Vox y los medios

El de Casado es un viraje brusco de rumbo que el líder de Vox, Santiago Abascal, define como "la veleta azul". Tras un resultado bueno pero menos brillante de lo esperado en las generales, el líder de la formación de extrema derecha también ha hecho algunos ajustes en su estrategia: así, hoy por primera vez ha hecho declaraciones ante los periodistas antes de un acto, algo que no hizo en toda la campaña de generales.

Sin embargo, ha aprovechado la ocasión para arremeter contra el diario 'El País', al que ha vetado de su acto y a cuyos periodistas ha calificado de "activistas comunistas", por una información publicada en dicho medio sobre el presunto pasado falangista de su candidato al Parlamento Europeo.

En cuanto a Ciudadanos, su estrategia también está clara: desafiar las matemáticas parlamentarias y presentarse, aunque no lo sean, como la fuerza hegemónica a la derecha.

"Este es el partido que crece frente a los que mueren", ha señalado su presidente, Albert Rivera, que se siente fuerte y cree que su aval es la mejor manera de presentar a sus candidatos.

En Podemos creen que esta campaña va más allá de las comunidades y los municipios y que la fuerza que obtengan el 26M será decisiva para entrar en el Gobierno de Pedro Sánchez.

"Estas elecciones van a ser muy importantes en clave estatal", ha señalado su secretario general, Pablo Iglesias. "Del resultado de las elecciones municipales, autonómicas y europeas dependerá que haya un Gobierno de izquierdas de verdad", ha añadido.

Desde el Partido Socialista, por su parte, insistirán en su estrategia para que la izquierda siga movilizada.