El derecho a una muerte digna es un reclamo que viene de lejos y que ahora está mucho más cerca. Y es que, tras años de bloqueo, la ley de la eutanasia llega al Congreso. Según ha podido saber laSexta, PSOE, Unidas Podemos, Ciudadanos, ERC, JxCat, EH Bildu, Nueva Canarias, Compromís y Más País se posicionarán a favor, mientras que Partido Popular, Vox y UPN votarán en contra.

Esta proposición de ley recoge claves y supuestos que tendrán que cumplirse para que la eutanasia pueda ser aplicada. En primer lugar, se realizará un consentimiento informado, por el que será el paciente el que, en pleno uso de sus facultades y de forma libre, el que pueda solicitarla. En ningún caso podrán hacerlo cónyuges, padres, hijos o hermanos.

Además, el paciente tendrá que presentar dos solicitudes por escrito. Entre una y otras pasarán al menos 15 días naturales, a no ser que el médico responsable considere que la muerte o pérdida de capacidad sea inminente. En estos casos, podrá acelerarse el proceso, pero en el resto, el período mínimo será de 32 días, desde que se solicita hasta que la eutanasia pueda llevarse a cabo.

Dos médicos independientes serán los que evaluarán al enfermo

Dos médicos independientes serán los que evaluarán al enfermo y luego el caso será remitido a una comisión de control y evaluación que lo valorará de nuevo, algo que no sucede en otros países.

Respecto a quien podrá solicitar esta ley, serán personas con una enfermedad grave, crónica e invalidante o una enfermedad incurable con un pronóstico de vida limitado. En todos los casos en los que se apruebe, siempre será un profesional sanitario el que la llevará a cabo, o en un hospital o en casa.

Así mismo, se recoge la objeción de conciencia de los médicos, que podrán negarse a llevar a cabo el proceso, pero facilitando que lo cumpla otro facultativo. Cabe destacar, además, que en caso de arrepentirse, el paciente podrá negarse a su aplicación en cualquier momento previo.