El consejero de Sanidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, solicita a Salvador Illa medidas extraordinarias en el aeropuerto de Barajas y pide una prueba PCR "que deberá ser hecha entre 48 y 72 horas antes del vuelo y un certificado negativo" para viajar a Madrid de "terceros países con alta incidencia en COVID-19 de los que proceden la mayor parte de los casos importados en la Comunidad de Madrid".

Además, Escudero detalla que este certificado negativo debe ser un requisito en el momento de realizar las gestiones de embarque". Por otro lado, el consejero también señala que los viajeros de estos países deberán rellanar un formulario, que se volcará en la aplicación 'CoronaMadrid', en donde además de su datos personales y su número de contacto, aparezcan el número de vuelo y de asiento así como la dirección en la que dicho pasajero se instalará durante su estancia en la Comunidad.

Escudero resalta que han recibido "buenas palabras del ministro", quien les ha propuesto la firma de un convenio de colaboración para intercambiar datos entre Sanidad Exterior y la Comunidad de Madrid.

Y es que Escudero asegura que desdeel Gobierno madrileño están preocupados por este "gran número de casos importados" que reciben por el aeropuerto. "Tenemos contabilizados 77 casos importados, de ellos 43 en julio, y en solo dos días hemos detectado 13 casos", destaca el consejero de Sanidad. Además, señala que esta "intranquilidad" del Ejecutivo madrileño "aumenta" ya que "el Gobierno de Sanidad, a través de Sanidad Exterior, solo ha detectado 4 de los 77 casos totales detectados en esta Consejería" por lo que afirma que "los controles no están funcionando".

Además, Escudero señala que aunque "los madrileños son los más concienciados con el uso de la mascarilla", se ve "obligado" a "insistir aún más en su uso". "Es muy importante la responsabilidad del ciudadano de usarla en el entorno privado", destaca el consejero madrileño de Sanidad, que recuerda que "la mayor parte de los brotes se están dando en reuniones con familiares y amigos y en celebraciones con personas no convincentes".

Aunque la Comunidad de Madrid sigue sin implantar el uso de la mascarilla obligatoria en todo momento, Escudero manda un mensaje de responsabilidad a los jóvenes madrileños e insiste en "el máximo compromiso de cada ciudadano en el uso privado".