La Fiscalía pide 25 años de prisión para Oriol Junqueras al considerarle el líder de una rebelión con "numerosas situaciones de violencia", acusación que la Abogacía del Estado rebaja a 12 años al acusarle de sedición.

En una entrevista en el diario Ara, Junqueras asegura que hay una "desproporción absoluta" con la realidad, ya que les acusan de unos delitos que "no" han cometido "basándose en una violencia que no ha existido", ha dicho y ha añadido que "cualquier sentencia que no sea la absolución será una sentencia injusta".

Junqueras asegura que poner fundamentos a largo plazo y ampliar la base son condiciones 'sine qua non' para llegar a la independencia y apuesta por seguir trabajando para que el independentismo sea mayoritario de forma transversal en toda Cataluña.

Reconoce que tener un calendario "tan exigente" para conseguir un objetivo "tan ambicioso" como la independencia "no fue la mejor manera" de plantear la república y dice que Cataluña no es una República, pero que nunca habían estado "tan cerca de conseguirla".

Para Junqueras, la posibilidad de hacer un tripartito "no tiene ningún fundamento" y destaca que la prioridad de ERC para las próximas elecciones municipales es que Ernest Maragall sea el nuevo alcalde de Barcelona.

También ha dicho que "nadie entendería que el hecho de continuar en prisión dependa de votar unos presupuestos" y que afrontar el juicio por el 1-O desde la cárcel perjudica su derecho a tener un "juicio justo".

El presidente de ERC ha explicado que en la cárcel da clases a los internos de temas muy diversos y pasa las horas en la biblioteca y haciendo deporte y asegura que la ausencia de sus hijos es la parte "más dura y dolorosa" y que un año sin ellos es un "daño irreparable".