La revista 'Interviú' ha relacionado en uno de sus artículos a Blesa, su amante y la jueza María Tardón. De esta manera, Blesa vuelve a estar en el centro de la polémica. Olga Cruz fue la supuesta amante de Miguel Blesa y también consejera de CajaMadrid. 

Cruz está casada, y los problemas comienzan cuando su marido se entera. Su forma de reaccionar, mandar (a ella y a Blesa) correos electrónicos acusándoles de ser amantes, mofándose de Blesa sobre política y finanzas.  Comunicaciones que llegaron a la Justicia a finales de 2012 cuando el juez Silva lo investigaba. 

Blesa envío a su empleada un mail en el que le explicaba que dormía en el lado izquierdo de la cama apoyado en la oreja derecha y con sueño ligero, a esto añadía: "si te tengo al lado aprovecharé para algo".

Resulta evidente que algo había entre ellos y, en esta situación el marido afectado comenzó la batalla. Manzó un correo a Blesa y a su mujer diciendo lo siguiente: "descubrí que llevabas meses cepillándote a tu presidente. Por cierto alguien vio una foto tuya con Blesa. es el abuelito, ¿a que si?". Sin embargo, no se queda ahí, en un siguiente e-mail incluia una imagen de su mujer en toplles.

En este sentido, se burla del expresidente de Caja Madrid, "no te vayas a olvidar del ascenso". E incluso le llega a hablar en tono jocoso de su futuro, y de su rivalidad más que conocida con Esperanza Aguirre: "Miguelín, estaba cantado, ya te dije que desde que Esperanza te había puesto el ojo te olía la cabeza a polvora. Hasta pronto, lince ibérico. Era tal la situación que hasta la seguridad de la entidad llegó a prohibirle la entrada al edificio. 

En esta historia también desempeña un papel importante la jueza María Tardón, que en la actualidad forma parte del juicio contra Elpidio José Silva, que ya la recusó por haber trabajado en la entidad. Ella dijo que nunca tuvo amistad con Miguel Blesa, pero condenó al exmarido de la empleada de la entidad que le había mandado los correos. La sentencia le obligó a pagar 4.440 euros de multa y añadía una orden de alejamiento de seis meses. Esto, después de que el primer juicio fuera absuelto.