Hoy es un mal día para Carles Vallejo. El expreso político tenía la esperanza de que se admitiera la querella que presentó porlas torturas que le infligió la policía franquista en los años 1970 y 1971, unos hechos terroríficos que sufrió en una de las comisarias más sanguinarias de la dictadura, situada en la Vía Laietana de Barcelona. Sin embargo, la Justicia ha puesto freno a que se investiguen.

Y es que la titular del Juzgado de Instrucción número 18 de la Ciudad Condal ha decidido rechazar su petición. La magistrada, en el auto al que ha tenido acceso laSexta Noticias, señala que existe un "obstáculo insalvable", laLey de Amnistía de 1977 aprobada tras el final de la dictadura, y dispone que "inadmite la querella interpuesta al estar prescritos y amnistiados los hechos denunciados".

La decisión judicial ha sido un jarro de agua fría para el sindicalista, su abogada y otras tantas personas que también sufrieron torturas durante la dictadura y llega a pesar de que inclusola propia Fiscalía apoyó por primera vez que se investigasen torturas de la policía franquista. "El trauma lo llevamos dentro las personas que hemos sufrido estas torturas", lamenta Vallejo.

La víctima y la Fiscalía recurrirán

El sindicalista ya ha anunciado que recurrirá para que no se archive definitivamente. También lo hará el Ministerio Público, según avanza la agencia Efe, como ya ha hecho la Generalitat, acusación popular en el caso. No comparte, como da a entender la jueza, que la Ley de Memoria Democrática recientemente aprobada dé pie a investigar por vía penal este tipo de crímenes. "Es el derecho a la verdad y yo quiero saber mi verdad, que es la verdad de muchas personas que sufrieron aquí", reivindica Vallejo.

Además, su abogada, Sònia Olivella, insiste en que "se está obviando el cambio jurídico y político que supone la Ley de Memoria Democrática". El propio ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, siempre ha subrayado que "las torturas y los delitos de lesa humanidad se pueden investigar" en virtud de la misma. laSexta ha consultado a expertos juristas como el magistrado Joaquim Bosch, que explica que "en el código penal del franquismo no estaba tipificado el delito de torturas ni tampoco los crímenes de lesa humanidad" y "por lo tanto, no podrían aplicarse de manera retroactiva".

Carles Vallejo no está dispuesto a dejarlo pasar: él tiene grabados a fuego los recuerdos de aquellos agónicos momentos que vivió y quiere que sean reparados con justicia: "Recuerdo la oscuridad, el aislamiento. Te ponían en el centro y te golpeaban con patadas y puñetazos". Ahora, espera que su recurso tenga un mejor resultado.