¿Quién no ha tenido algún problema con Hacienda? De los modestos, claro. Las equivocaciones a la hora de realizar la declaración de la renta son bastante comunes. Una subvención que, al ser un beneficio, se debe declarar; un fallo en el borrador; incluso, enviar sin querer dos declaraciones en vez de solamente una. Independientemente del error, la regularización de la declaración siempre va acompañada de una sanción.

No obstante, ahora una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Galicia podría sentar un precedente hacia lo contrario. Por primera vez, admite el "derecho al error" que tiene una persona a la hora de hacer su declaración de la renta. El demandado por Hacienda se equivocó a la hora de hacer la declaración y la Agencia Tributaria le envió una sanción. Su abogada, Nadia Vasallo, asegura que "no tenía intención de engañar a Hacienda", sino que "simplemente un asesor fiscal le aconsejó una operación compleja".

Con la complejidad, llegó la confusión. Sin embargo, el juez "reconoce que tiene derecho a equivocarse". También lo admiten los propios asesores fiscales. Las normas para realizar la declaración de la renta "son bastante complejas, porque cambian constantemente", asegura Ramón Varela, que añade: "Cuando se recurren, se ganan siempre, porque si ha habido una interpretación razonable de la norma, no se debe de sancionar".

El problema ahora radica en lanzarse a esa reclamación. Muchos nos aseguran que la burocracia a seguir para no pagar esa multa, a veces no compensa el simple hecho de realizar el pago.