El abogado del yerno del Rey impugnará los correos de Torres para que no sean incluidos como prueba y el secretario de las infantas se querellará contra Torres porque considera que la difusión de los correos viola su intimidad.
Tras escuchar las declaraciones de Urdangarin, Torres y García Revenga, el juez tiene ahora que decidir si imputa al conde de Fontao, asesor de la Casa Real.
El juez Castro pedirá a Zarzuela su libro de visitas para comprobar si el duque de Palma mantuvo una reunión en el palacio con Francisco Camps y Rita Barberá. El yerno del Rey niega este encuentro, pero su socio Diego Torres mantiene que se celebró.
La mayor preocupación del duque de Palma es dejar claro que ni el Rey ni la Infanta estaban al tanto de lo que hacía en Nóos y, mediante la lectura de un comunicado ante el juez, Urdangarín declaraba que "la casa real ni opino, ni asesoro, ni avalo ni autorizo" sus actividades en el Instituto sin animo de lucro.
En la misma linea declaró el secretario de las infantas, Carlos García Revenga, que afirmaba que el Rey no sabía que él ni la infanta estaban en la Junta Directiva de Nóos.
Revenga se defendio y aseguró que su papel como tesorero de Nóos era "testimonial" y que lo asumió por amistad con el duque para tutelarle en la que era la "primera aventura empresarial" del marido de la Infanta.
La batalla procesal se centra desde las declaraciones de Urdangarin y García Revenga en los e-mails presentados por Diego Torres, exsocio del duque.
El abogado de Urdangarin, Mario Pascual, dice que "podrían ser ilícitos y estar manipulados" y piensa impugnarlos. La defensa de Garcia Revenga también afirma que la entrega de esos correos es ilegal y que viola la intimiad de su cliente, por lo que anuncia una querella contra Torres.
Sin embargo, si el juez Castro da validez a estos correos podrían producirse nuevas imputaciones en el caso. Las consultas de Urdangarin a Revenga y a Jose Manuel Romero, harían que el asesor jurídico de la casa real fuera llamado a declarar, auqnue no se sabe si como imputado o testigo.
Otras de las posibles imputaciones, que llegarían a raiz de la declaracion de Torres, serían las de Camps y Rita Barberá. Todo apunta a que el juez va a pedir el libro de visitas de Zarzuela, para ver si se reunieron allí con Urdangarin en 2004 para hablar sobre la celebracion del Valencia Summit. Camps y Urdangarin ya han negado esa reunión.