Eduardo Muñoz de Baena, letrado del Juzgado de lo Penal 31 de Madrid, ha accedido a la petición del PP y por la Fiscalía y ha prohibido la retransmisión en directo del juicio por las destrucción de los ordenadores de Luis Bárcenas.

No obstante, pese a que el auto no autoriza la cobertura íntegra de la sesión, sí que permite a los medios de comunicación acceder a la sala para que puedan informar sobre desarrollo de la vista oral.

"La emisión de imágenes se limitará a grabaciones mudas captadas en los momentos previos al inicio de las sesiones, con planos de los acusados posteriores o laterales", explica el texto.

El Partido Popular, que se sentará en el banquillo de acusados como persona jurídica, emitió un escrito hace tiempo pidiendo que se adoptasen las medidas necesarias para evitar la identificación de acusados, testigos, peritos y concretamente del "representante especialmente designado del Partido Popular que será un abogado externo ajeno al partido".

La Fiscalía también notificó al Ministerio Público estar a favor de la no emisión para "garantizar el derecho de defensa" y evitar que los testigos "que hayan de declarar en el juicio oral puedan tener conocimiento de lo que hubiesen declarado otros testigos o, incluso, los propios acusados".

Aunque el juez de lo Penal de Madird afirma que se trata de un juicio "notorio o con interés mediático" coincide con la Fiscalía en que si se emite en abierto, directo o mediante su posterior producción audiovisual, los testigos podrían "conocer" la declaración de los acusados y de otros comparecientes previos.