Juan Carlos I y Felipe VI se han encontrado por primera vez desde hace casi dos años, cuando el primero abandonó España y puso rumbo a Emiratos Árabes entre escándalos por su patrimonio en el extranjero. El exmonarca ha llegado pasadas las 10 de la mañana a Zarzuela después de un fin de semana en Sanxenxo que no ha sido todo lo discreto que la Casa Real deseaba.

El emérito aseguraba ayer que tenía "muchas ganas" del encuentro con su hijo. Una visita de la que esperaba "muchos abrazos" y "ver a la familia", según decía el propio Juan Carlos I ante las puertas del Club Náutico de Sanxenxo. Pero lo cierto es que poco trascenderá de la reunión en Zarzuela, ya que Casa Real la ha catalogado como un encuentro familiar, y por el momento no está previsto que se faciliten imágenes.

Un encuentro entre padre e hijo que genera cierta inquietud en Zarzuela y que, en cualquier caso, será breve, puesto que el rey emérito no tiene previsto hacer noche en la capital y regresará a Abu Dabi hoy mismo. El periodista José Antonio Zarzalejos cita este lunes en 'El Confidencial' a fuentes próximas a la Casa Real que califican la forma en que la visita del monarca se ha desarrollado como "una enorme equivocación". Aducen que el emérito no habría cumplido el acuerdo expresado en su carta a Felipe VI del pasado mes de marzo, en la que indicaba su propósito de organizar su vida personal y lugar de residencia "en ámbitos de carácter privado para continuar disfrutando de la mayor privacidad posible".

La reunión entre el ex jefe del Estado y el actual monarca se produce en el último día de la visita de Juan Carlos I a nuestro país, donde aterrizó el pasado jueves rodeado de una enorme expectación mediática. El emérito -que fue recibido en Vigo por su hija la infanta Elena- ha pasado el fin de semana disfrutando de las regatas en la localidad pontevedresa de Sanxenxo, alojado en casa de su amigo Pedro Campos.

Pedro Campos, amigo íntimo del rey emérito y su anfitrión estos días en Sanxenxo, explicaba esta misma mañana tras dejar a su amigo en el aeropuerto que ha visto a Juan Carlos I "muy contento". "Se iba con mucha ilusión de reunirse con la familia y han sido tres días estupendos", ha explicado.

Mientras, la ministra portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, ha afirmado hoy en 'RNE' "que estos días de visita del rey Juan Carlos ha perdido una oportunidad que los españoles esperaban de dar explicaciones, de pedir perdón, y sin duda ha perdido la oportunidad que merece la sociedad española pero también la democracia". Por contra Rodríguez ha afirmado que el actual rey, Felipe VI, "está haciendo un ejercicio formidable por recuperar esa esencia que debe primar en una institución del Estado que es transparencia, que es ejemplaridad".

Inquietud en Zarzuela

Mientras sobrevuela la incógnita de si podremos ver a Juan Carlos I y Felipe VI juntos, lo cierto es que la visita del emérito a Zarzuela tras dos años de ausencia está suponiendo un quebradero de cabeza para la institución. En este sentido, la periodista Carmen Enríquez avanzaba en laSexta Noche que la Casa Real esperaba que la visita se hubiera llevado a cabo "en un clima de discreción", algo que no ha ocurrido.

En los últimos tiempos, Felipe VI ha tratado de marcar distancias con su padre, que llegó a tener hasta tres diligencias abiertas por sus negocios presuntamente irregulares, hoy archivadas. El último gesto en este sentido fue hacer público su patrimonio a finales del mes pasado.

Pedro Campos confirma que el emérito vuelve en junio

El amigo del rey emérito, Pedro Campos, que le ha alojado en su casa de Sanxenxo estos días, ha señalado a su llegada a la vivienda, tras llevarle al aeropuerto, que el monarca se fue contento con la prensa y también con el resultado de la regata. Según ha indicado, en principio volverá en junio a su casa de nuevo.