Los indignados franceses se han sumado a la conmemoración del quinto aniversario del movimiento 15M con una congregación en distintas ciudades de Francia y del extranjero.

La Plaza de la República en París, cuartel general de la iniciativa francesa desde hace mes y medio, encabezó la movilización en Francia con conciertos, asambleas y una conexión virtual con el resto de protestas globales.

130 ciudades de 28 países, según su comunicado, han respondido a su llamamiento 'Global Debout', lanzado con el objetivo de "ocupar las plazas públicas de todo el mundo para juntarse, expresarse y reapropiarse de la política".

Mes y medio después de su nacimiento, el apoyo ciudadano a la 'Nuit Debout' se sitúa ahora en el 49%, 11 puntos menos que en abril, apunta un sondeo difundido por el diario 'Le Parisien', según el cual la mitad de la población cree que habría que prohibirlo ante los altercados ya registrados.

Los indignados franceses tienen uno de sus principales objetivos en la retirada de la reforma laboral, que el Gobierno socialista hizo aprobar esta semana en primera lectura en la Asamblea Nacional sin el voto de los diputados.