El ministro de Sanidad, Salvador Illa, comparte los datos "preocupantes" de la pandemia de coronavirus en España, si bien especifica que no está sobre la mesa del Gobierno decretar un nuevo confinamiento domiciliario.

Son dos de los titulares que deja en su comparecencia de este sábado, en la que añade que el ritmo de vacunación está siendo "óptimo" y que se ha alcanzado una "velocidad de crucero" en los últimos días.

"Tenemos el conocimiento y la experiencia para doblegar esta curva. (...) El estado de alarma funcionaba y funciona", defiende Illa.

Sobre la posibilidad de ampliar el horario del toque de queda, Illa ha abierto la puerta a modificar la franja actual (de 23:00 a 6:00 horas, con opción a retrasarlo o adelantarlo una hora en cada franja). "Si hay que revisar esta franja horaria vamos a hacerlo con todo el mundo. El Gobierno nunca se ha negado a escuchar", ha defendido el ministro.

Sí que ha insistido en que el confinamiento no es una opción. "Doblegamos la segunda ola sin un confinamiento domiciliario", afirma Illa.

Donde se ha visto más optimista al ministro ha sido hablando sobre las vacunas, cuando ha reconocido que se ha alcanzado un ritmo "óptimo" en los últimos días, llegando a alcanzarse una "velocidad de crucero".

"Somos el noveno país en ritmo de vacunación; vamos a lograr de aquí al verano que un 70% de los españoles hayan recibido la vacuna. Con una estrategia que funciona lo vamos a lograr", asevera el ministro.

Los datos de la pandemia en España

Estas palabras llegan después de que España haya registrado su peor jornada de los datos del coronavirus desde que comenzase la pandemia. En las últimas 24 horas, Sanidad registró más de 40.000 nuevos contagios, con una tasa de incidencia acumulada disparada.

Cinco comunidades autónomas se encuentran por encima de los 700 casos por cada 100.000 habitantes: Extremadura (1.220), Murcia (889), Castilla-La Mancha (780), Comunidad Valenciana (760) y La Rioja (738). El dato de incidencia acumulada es de 575 casos de media en todo el país.

Ante este incremento de casos generalizado, algunas comunidades autónomas han empezado a tomar más medidas restrictivas, como adelantar sus toques de queda o limitar las reuniones sociales.