La hermana del rey ya sabe que la Fiscalía quiere exculparla en el 'caso Nóos' a cambio de que devuelva unos 600.000 euros. "La responsabilidad civil de la infanta no tiene que ver con la responsabilidad civil de Iñaki Urdangarin", afirma el fiscal Pedro Horrach "Una deriva del delito y la otra de su participación a título lucrativo".

El escrito del fiscal es todo un alegato a la inocencia de Cristina de Borbón. Asegura Horrach que tras una profunda investigación sobre la infanta solo se ha llegado a un raquítico pudo conocer. Y dice que se le ha colocado en una situación de indefensión y que querer sentarla en el banquillo carece de coherencia.

Una posición que prácticamente coincide con la de los abogados defensores de la infanta. Pagará dicen, lo que le solicitan. "Es intención de la infanta consignar de manera inmediata la cantidad para dejar así extinguida cualquier responsabilidad civil", revela el letrado Miquel Roca.

Desde el primer momento el fiscal ha intentado dejar fuera a la infanta y eso le ha provocado más de un choque con el juez Castro, que sigue teniendo ahora la última palabra. Él  será quien decida finalmente si Cristina de Borbón se sienta en el banquillo de los acusados.

La acusación de Manos Limpias no tiene dudas y en su escrito llegan a pedir 8 años de cárcel para la hermana del rey. Porque, aseguran, ha sido colaboradora necesaria en dos delitos fiscales, plena conocedora de todo lo que hacía su marido.

La cuestión está ahora en saber si a la infanta crisitina se le aplica la doctrina Botín o la doctrina Atutxa. Es decir, si se sigue o no adelante con su caso aunque solo haya una acusación popular.