Tras varios días de silencio, el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha reaparecido en Bruselas para criticar la reforma española de las pensiones. Lo ha hecho después de reunirse, entre otros, con miembros de la Comisión Europea con quien el Gobierno de Pedro Sánchez pactó esa reforma.

Considera que el ministerio que dirige José Luis Escrivá ha puesto "un parche" en esa "pretendida reforma de las pensiones que no es otra cosa que el aplazamiento de la sostenibilidad de las pensiones". Para Feijóo,el modelo a seguir es el francés, el de Emmanuel Macron, que ha roto la paz social allí.

"El Gobierno francés está haciendo exactamente lo contrario de lo que está haciendo el Gobierno español. Seguro que uno de los dos se equivoca, y me da la sensación de que nos estamos equivocando", ha manifestado.

Al asegurar que prefiere la reforma francesa que está teniendo como consecuencias numerosas jornadas de huelgas y violentas manifestaciones, el Gobierno le recuerda como se ha hecho aquí. "Se ha ejecutado con paz social, en un entorno de paz social, que contrasta con otros países de nuestro entorno, y además ha sido trabajado intensamente con la Comisión Europea.

Al poner a Francia como ejemplo, dice Escrivá, Feijóo ha destapado sus planes, "está diciendo con toda claridad que su solución es básicamente el recorte de pensiones, aumentar la edad de jubilación, recortar más derechos y además hacerlo en un clima de confrontación social".

Y define así las declaraciones del líder del PP: "Es un ejercicio extraordinario de irresponsabilidad, de frivolidad, de insolvencia y de falta de patriotismo", porque, dice con estas criticas hace daño al país.

La vicepresidenta del Gobierno Nadia Calviño cree que yéndose fuera a criticar al Gobierno, Feijóo "trata de atacar la imagen y los intereses de nuestro país". "Me parece absolutamente inaceptable, inaudito e inconcebible que alguien pueda ser tan desleal con su propio país como lo está haciendo Feijóo".

Desde Bruselas, Feijóo se ha referido también a la moción de censura, asegurando que se ha abstraído "del esperpento político que se ha vivido en España", dice. Un esperpento al que el PP no voto en contra, solo se abstuvo.