El Gobierno ha querido devolver el honor de los siete científicos que en su día fueron todos miembros de la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales y durante la Guerra Civil o la dictadura fueron cesados y les fueron retiradas sus medallas por razones políticas, ideológicas o de creencia contrarias al régimen.
Esto provocó, recuerda el Gobierno, el menoscabando de su derecho al honor y a la propia imagen personal, profesional y académica, viéndose obligados algunos de ellos a recurrir al exilio.
El Consejo de Ministros, basándose en la Ley de la Memoria Histórica y a propuesta del ministro de Ciencia, Innovación y Universidades y de la ministra de Justicia, ha declarado "el carácter radicalmente injusto" de las disposiciones por las que se acordó el cese, ha explicado el Ministerio de Ciencia en una nota.
Estos siete investigadores científicos y académicos de la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales tienen en común la pérdida en vida de sus medallas académicas: Enrique Moles Ormella (medalla 1), Ignacio Bolívar y Urrutia (2), Honorato de Castro y Bonel (5), Enrique Hauser y Neuburger (10), Emilio Herrera Linares (15), Pedro Carrasco Garrorena (18) y Blas Cabrera y Felipe (22).
"Con este acuerdo se honra y recupera a los que padecieron las injusticias y agravios durante la dictadura, a través de la reparación moral y la recuperación de su honor y su memoria personal y familiar", ha resumido el Ministerio.
La Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales nació con el objetivo de fomentar el estudio y la investigación de las ciencias exactas, físicas, químicas, geológicas y biológicas y de sus aplicaciones, así como propagar su conocimiento. La integran 54 académicos numerarios, que reciben una Medalla Académica en cuyo dorso figura el número correspondiente y que deben ostentar en los actos corporativos; cuando por fallecimiento u otra causa sean baja como numerarios, esta medalla es devuelta a la academia, que conserva siempre su propiedad.
En este caso no se devuelve la medalla a los citados científicos, pues todos han fallecido, sino que se les repara el honor y su memoria personal y familiar.
Además, el Gobierno ha acordado poner en marcha una comisión de trabajo para la rehabilitación y garantía del derecho al honor de los miembros de las reales academias y academias de ámbito nacional.
Estará presidida por la secretaria de Estado de Universidades e I+D+i, Ángeles Heras, y entre sus principales objetivos tendrá el de investigar las sanciones administrativas impuestas a sus miembros, determinar su carácter injusto, valorar la legitimidad de las sanciones y reconocer el derecho al honor y a la propia imagen de los científicos.