El Gobierno de España ha ordenado el cierre de todos los hoteles y alojamientos turísticos de España en el plazo máximo de siete días, con medida extraordinaria para combatir la crisis sanitaria provocada por el coronavirus Covid-19.

Según publica esta noche el Boletín Oficial del Estado, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, decreta "la suspensión de apertura al público de todos los hoteles y alojamientos similares, alojamientos turísticos y otros alojamientos de corta estancia, campings, aparcamientos de caravanas y otros establecimientos similares, ubicados en cualquier parte del territorio nacional".

El Ejecutivo establece que el cierre debe realizarse "en el momento en que el establecimiento no disponga de clientes a los que deba atender y, en todo caso, en el plazo máximo de siete días naturales desde la entrada en vigor de la presente norma".

No obstante, permite mantener abierto el establecimiento a quienes tengan clientes que, en el momento de declaración del estado de alarma, estuvieran alojados "de manera estable y de temporada, siempre que sus ocupantes cuenten con las infraestructuras, en sus propios espacios habitacionales, para poder llevar a cabo las actividades de primera necesidad" con las garantías y medidas que establece el estado de alarma.

En estos establecimientos prohíbe admitir a nuevos clientes "hasta que finalice la suspensión prevista en el apartado anterior" y con carácter general permite que todos los alojamientos mantengan "la prestación de los servicios de vigilancia, seguridad y mantenimiento en estos establecimientos".