La portavoz del Ejecutivo, María Jesús Montero, ha afirmado que el Gobierno prevé una amplia reforma del Código Penal que abarque "todos los capítulos", incluidos los delitos sexuales, los medioambientales y también el de sedición.

De esta manera, el Gobierno quiere revisar el Código Penal para ajustarlo a la "realidad" y a la "actualidad" y, para ello, pretende "hablar mucho, dialogar mucho y concitar todo tipo de acuerdos".

Montero ha aclarado que la posible revisión del delito de sedición no forma parte del acuerdo de Gobierno firmado entre el PSOE y Podemos, de modo que no hay una unidad de voto predeterminada, sino que se intentará llegar a un acuerdo con todos los partidos, incluido el PP.

Respecto a la posibilidad de endurecer el delito de rebelión, que lleva penas de cárcel de hasta 30 años, y suavizar el de sedición para delitos como los condenados por el 'procés', fuentes del Gobierno han dejado abierta esta posibilidad e incluso han llegado a comentar que sería una "orientación perfecta".

No obstante, y dado que esta cuestión no fue abordada en el acuerdo programático con Unidas Podemos, estas fuentes han insistido en que el Gobierno no tiene una propuesta de reforma del Código Penal en lo referido a los delitos cometidos por los independentistas en Cataluña.

Será, han dicho, el grupo parlamentario socialista quien deba impulsar la iniciativa en el Congreso. Si en el debate de reforma que se abra hay una posición coincidente, el PSOE y Unidas Podemos presentarán una propuesta de reforma única; de no ser así, cada partido llevará su planteamiento. Estas fuentes tampoco han descartado que la reforma contemple un "pack" único (revisión de ambos delitos) o, por el contrario, se trocee.

Más consenso hay en el resto de medidas que se quieren revisar, y principalmente se llevará a cabo un endurecimiento de las penas para los delitos medioambientales y el refuerzo del sí es sí en el consentimiento sexual.