Pablo Casado ha pedido a Pedro Sánchez que rompa con Unidas Podemos porque, a su juicio, es quien ha causado esta crisis con Marruecos: "Ayer insinuaron que Ceuta y Melilla no son españoles. Si Sánchez quiere dejar las cosas claras, que hoy mismo ropa con Unidas Podemos, que es quien ha producido la crisis diplomática".

En un acto en Fitur, el presidente del PP se ha preguntado si Sánchez está "con una oposición leal, que pide firmeza, o con sus socios de Podemos". Y ha emplazado al presidente del Gobierno a pedir ayuda: "Hay que defender siempre a Ceuta, no solo cuando se quiere sacar la pata de una crisis diplomática. Con Marruecos no se ha tenido una relación inteligente. Y eso es lo que yo critiqué ayer".

Antes que el líder del PP, el número 2 del partido, Teodoro García Egea, ya había elevado las críticas en declaraciones a laSexta, asegurando que los reproches de Casado en la sesión de control al Gobierno fueron "impecables" y que "con el PP no hubiese pasado".

"El PP está con el Gobierno para garantizar la seguridad de la frontera y apoyar a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, pero en esta dejación de funciones que están haciendo es difícil estar con un Gobierno que no sabe a dónde va", ha asegurado.

Egea ha instado a Sánchez a "coger la mano tendida a Pablo Casado" y ha señalado que "va a pasar a la historia por ser el único presidente que no ha tenido un pacto de estado con la oposición porque no la ha querido".

Palabras que ya han sido contestadas por José Luis Ábalos: "Casado tendría que estar con el Gobierno de España y con la política europea, no hace falta ninguna matización". También por Margarita Robles, en Al Rojo Vivo. Ha dicho que las declaraciones de Casado "me producen verdadero sonrojo (...) Con esta crisis diplomática, lo que tiene que hacer es apoyar al Gobierno. Hay veces que no se pueden hacer políticas partidistas".

Fuentes de Moncloa a laSexta, Podemos tiene su posición pero no ha tenido nada ver en esta crisis. Y defienden que la respuesta del Gobierno ha sido rápida y eficaz; confían en que Marruecos haya entendido el mensaje, dicen, de firmeza. Sostienen que es clave que la posición de España haya sido la misma que la de la Unión Europea. Aseguran que no ha sido necesaria la intermediación del rey, y el viaje a Marruecos del presidente no tiene fecha aunque creen que lo ocurrido estos días debería ser motivo para adelantarlo.

El mensaje más contundente en público por parte del Ejecutivo lo ha lanzado la ministra de Defensa, Margarita Robles, quien ha acusado a Marruecos de lanzar un "chantaje" a Españatras la apertura de la frontera con Ceuta, que ha provocado la llegada de más de 8.000 personas.

"No vamos a aceptar el más mínimo chantaje ni cuestionamiento de la integridad territorial. La integridad de España no es negociable ni está en juego y vamos a usar todos medios necesarios para garantizar la integridad territorial y vigilar las fronteras", ha dicho en una entrevista en RNE.

La ministra señala al país vecino y les acusa de vulnerar el derecho internacional al haber "lanzado" a ciudadanos a cruzar la frontera. Una crisis desatada por Marruecos en respuesta a laatención médica que España prestó al líder del Frente Polisario.

Mucho más prudente ha sido la ministra de Educación, Isabel Celaá, que asegura que no cree "que sea inteligente" culpar al Gobierno de Marruecos por la crisis: "Es un país vecino, socio, trabajamos en muchas políticas y Ceuta y Melilla son fronteras también de Europa y hay que cuidarlas". "No sería inteligente subir el soufflé más. A través de la diplomacia las aguas tienen que volver a su cauce", ha señalado.