La familia Franco ya no tiene la propiedad del Pazo de Meirás después de 82 años de una dudosa entrega y las llaves ya están en posesión del Estado. La titular del juzgado de A Coruña ha realizado un acto simbólico en la biblioteca de las Torres de Meirás, ya que los Franco declinaron acudir al mismo.

La juez Marta Canales ha presidido la entrega, a la que ha precedido una revisión del estado de los bienes pertenecientes al Pazo, inventariados el mes pasado, un total de 697 recogidos en el informe elaborado por los representantes de la Consellería de Cultura de la Xunta de Galicia, de ellos 81 en el exterior y 616 en el interior del pazo.

"Se produce hoy la feliz coincidencia de que celebramos el Día Internacional de los Derechos Humanos y la significación que este acto tiene en términos de memoria democrática encaja con el alcance de este día", ha aseverado la abogada general del Estado, Consuelo Castro, justo después de recibir la propiedad, en nombre de la Administración.

La devolución de las Torres de Meirás al Estado se ha producido entre protestas en los alrededores del pazo de quienes reclamaban la propiedad popular de la finca y acusaban a la familia Franco de haber "robado" para sí el histórico enclave.

"Yo no me pongo en la piel de nadie, pero soy gallega y sé lo que significa para mí. Y creo que es un día que deja una sensación de justicia histórica", ha asegurado Castro con las llaves del Pazo en la mano. "Es una devolución de un bien a las manos de quien nunca debió salir, que es el Estado", ha subrayado.

La representante del Estado ha querido destacar la importancia cultural del enclave más allá de la Familia Franco, ya que esa fue la casa de la escritora gallega Emilia Pardo Bazán. Castro ha lamentado que el franquismo "borró" la huella Pardo Bazán del Pazo de Meirás.

El Pazo no vuelve íntegro

Si bien el Estado recupera las Torres, no consigue todo lo incluido en la finca. En manos de los Franco siguen dos bienes que no fueron reclamados por la Administración: la Casa de las Conchas y el hórreo anexo al inmueble.

Además, la juez de A Coruña ha dado al Estado 20 días hábiles para que lleve a cabo un inventario de los bienes que tendría que devolver a la familia, después de que los Franco hayan presentado un recurso en el juzgado.

El acto simbólico de entrega se ha retrasado unas horas ya que los inspectores de al Xunta de Galicia tenían que comprobar que el inventario de bienes estaba completo y que los Franco no se habían llevado ningún objeto que perteneciese a la integridad del Pazo.

De eso se ha quejado esta mañana el nieto del dictador, Francis Franco, qua ha relatado su último día en el Pazo: "El viernes nos dijeron que no nos prorrogaban el plazo ni nos iban a dejar retirar nada, parece ser que sí nos iban a dejar retirar la ropa interior. Ya ayer fuimos para despedir a los criados que teníamos allí, un matrimonio, y para hacer la entrega en el juzgado", ha explicado a Antena 3.

Franco ha asegurado que la familia se negaba a prestarse al "circo", por lo que hoy no han estado presentes en el acto solemne. Sí ha participado un representante legal de la familia.

El alcalde de Sada reclama gestionar las visitas

El alcalde de Sada, Benito Portela, se ha felicitado por la vuelta de la propiedad al Estado: "La sentencia fue bastante rápida y esperamos que adquiera firmeza y por fin pase a ser de todo el pueblo y no de unos privilegiados que lo heredaron sin merecerlo", ha explicado en 'Al Rojo Vivo'.

Además, Portela ha explicado la necesidad de que el Pazo se gestione desde un consorcio donde estén presentes todas las administraciones implicadas: el Estado, la Xunta y el municipio. Las visitas las gestionaría el Ayuntamiento. "Entendemos que el contenido del Pazo tiene que ser la memoria de Pardo Bazán así como la memoria democrática", ha subrayado.