Puigdemont ha cruzado la plaza Sant Jaume entre aplausos y gritos a favor de la independencia. Un recibimiento muy diferente al que le han dado al ministro del Interior, que ha asistido como representante del gobierno y dentro ha conversado entre risas con el líder de ERC

Mas ha acompañado al nuevo presidente hasta la sala  mientras le iba enseñando el edificio. Ya dentro ha empezado a hablar Artur Mas y ha contestado a la despedida que le daba el gobierno en el BOE agradeciendo los servicios prestados a todos. Seguido de un largo aplauso al que no se ha sumado el ministro del Interior.

Puigdemont se ha despedido con un deseo, llegar "al mejor puerto posible”. Obviando el juramento de fidelidad a la constitución y al rey, Puigdemont ha aceptado su cargo.

El President ha aprovechado su primer discurso para criticar al Gobierno declarando que Cataluña se encuentra "ahogada y humillada" financieramente y desatendida por las inversiones del Estado. Asi mismo ha asegurado que este es el inicio del viaje de Cataluña hacia la independencia.