La junta de gobierno local de Málaga ha dado el visto bueno a la Ordenanza de Protección Animal, en la que se recoge, entre otros, la confección del censo genético canino, da visibilidad al gato feral y revisa lo establecido sobre la alimentación de los animales en la vía pública.

El concejal de Sostenibilidad Medioambiental, Raúl Jiménez, ha destacado que "lo que perseguimos es trabajar por encima de todo en favor de la protección y el bienestar animal, revisando conceptos y garantizando su tenencia responsable por parte de sus dueños para que Málaga sea una ciudad amiga de los animales".

La nueva normativa también promueve la esterilización de las mascotas como parte de las medidas que favorecen la reducción del abandono, y se fomenta la adopción de animales como alternativa a su compra.

Asimismo, el documento incluye la prohibición expresa del uso por particulares de collares que puedan ser considerados de castigo. En otro de sus apartados, la ordenanza introduce como novedad el reconocimiento explícito del gato feral, al que define como el felino perteneciente a una especie doméstica, pero que no está socializado con seres humanos.

Otra de las novedades de la normativa es la modificación de las condiciones para el acceso de los animales de compañía a los establecimientos públicos, incluidos hoteles, restaurantes, bares, tabernas y aquellos otros en los que se consuman bebidas y comidas.

Así, la entrada de mascotas quedará autorizada siempre que el local no muestre visible desde su exterior una prohibición expresa, previa autorización administrativa por el órgano competente. No obstante, la única excepción a esta autorización serán los locales dedicados a la elaboración, venta, almacenamiento, transporte o manipulación de alimentos o bebidas.

Sobre el transporte público, se apunta a que los poseedores de animales de compañía podrán acceder con ellos a la EMT o al metro, de acuerdo con las normas y procedimientos acordados por dichas empresas.

Respecto al establecimiento de circos, aunque existe un acuerdo de pleno, no se ha podido incluir en la ordenanza una prohibición expresa para aquellos que usen animales en sus espectáculos, recordando que la Junta de Andalucía tiene la competencia en esta materia.