Expertos en obesidad creen que elaborar una ley para obligar a hacer ejercicio durante la jornada laboral ayudaría a reducir la cifra de esos 7 de cada 10 españoles que no hacen ejercicio. Algunas empresas ya cuentan con instalaciones deportivas y permiten a sus trabajadores interrumpir la joranada para practicarlo.
Apagas el ordenador, coges la bolsa y en un minuto ya estás dándolo todo. En la sede de Kyocera tienen gimnasio dentro del trabajo. Gratis, cuando quieras. Eso sí, en tus horas libres.
Si quieres algo más personalizado, también hay un entrenador personal, pagado por la empresa para ti. Y también pista de padel. Ahora mismo esto es un lujo, pero la la Sociedad Española de Obesidad pide que sea obligatorio.
Es más, quieren que, por ley, nuestros jefes nos permitan hacer ejercicio dentro de nuestro horario laboral. Porque es bueno para los trabajadores: mejora su salud y ayuda a evitar dolores de espalda y de hombros.... pero también es bueno para la empresa: la gente se coge menos bajas, un 22% menos según algún estudio.
En Novartis, además de gimnasio tienen yoga pilates o zumba. A Dani su empresa le paga por ir en bici a trabajar. Casi 40 céntimos por kilómetro. Y también le ha puesto duchas por si suda en el trayecto.
Pero si nos vamos a otros países, suben el listón. Una empresa sueca obliga a todos sus empleados a hacer una hora de ejercicio a la semana. Todos juntos, para hacer equipo.
Que no tienes tiempo para parar. Pues puedes moverte mientras trabajas con el ordenador. Esto es Silicon Valley. Está demostrado que incluso el ejercicio más suave, mejora la salud física. Y la mental. te concentras más y produces más.