Los sindicatos de los estibadores y la Asociación Nacional de Empresas Estibadoras y Consignatarias de Buques (Anesco), han vuelto a reunirse con una delegación de representantes del Gobierno, encabezada por el secretario de Estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda, Julio Gómez Pomar, con el fin de lograr una acuerdo que permita la liberalización del sector.
Tras la reunión, celebrada en la sede del Consejo Económico y Social (CES), el coordinador general de la Cetm, Antolín Goya, ha explicado que patronal y sindicatos han cumplido su parte al acordar una subrogación con rango de ley, mientras que el Gobierno ha mostrado su rechazo.
Sin embargo, Gómez-Pomar ha explicado que la propuesta incumple la sentencia del Tribunal de Luxemburgo, que impide subrogar puestos de trabajo por ley, aunque ha añadido que el Gobierno se sumaría a este principio de acuerdo si la subrogación fuese por mero convenio colectivo entre las partes.
El Gobierno podría amparar un acuerdo fruto del diálogo social previo entre las partes con una normativa que desarrolle los puntos del mismo, siempre que no tenga rango de ley. Gómez-Pomar ha criticado también que la patronal y sindicatos hayan pedido que el Gobierno, y "todos los españoles", asuman la diferencia salarial entre los nuevos contratos y los antiguos. Anesco ha lamentado en un comunicado que el Gobierno no se haya sumado al pacto alcanzado entre empresas y sindicatos y confía en que la situación se pueda reconducir por el Gobierno "a la mayor brevedad posible".
La patronal destaca que lo acordado tiene elementos positivos para el sector relacionados con la organización y la producción y con la garantía de la continuidad en el empleo de los trabajadores actuales de la estiba. El secretario de Estado de Infraestructuras ha explicado que el mediador del conflicto, el presidente del Consejo Económico y Social de España (CES), Marcos Peña, presentará una propuesta de acuerdo a las partes para tratar de avanzar en las negociaciones.
Por ahora, las partes no han fijado ningún calendario de nuevas reuniones a la espera de que el mediador haga pública su propuesta mañana. Respecto a otros puntos del acuerdo, los sindicatos han puesto sobre la mesa una rebaja salarial del 10%, una cuantía que ha sido bien recibida por Anesco, al suponer una mayor reducción, respecto a la propuesta anterior de rebaja del 6%.
Goya ha explicado que en la mesa se han planteado fórmulas para garantizar un ajuste óptimo de las plantillas mediante jubilaciones incentivadas y ha insistido en la creación de una comisión de seguimiento del acuerdo, compuesta por tres representantes del Gobierno, tres de la patronal y tres de los sindicatos.