Priviet Sportive, la empresa que pagó comisiones al hermano de Isabel Díaz Ayuso por la compra de mascarillas en China que llegaron a Madrid durante los peores momentos de la pandemia, se embolsó un beneficio de un millón de euros por esta operación. Así se expone en la documentación que ha aportado la compañía con la que colaboró Tomás Díaz a la Fiscalía Anticorrupción. De ese escrito se desprende que Priviet Sportive pagó algo más de 500.000 euros por 250.000 mascarillas procedentes del país asiático y que posteriormente vendió al Servicio Madrileño de Salud por 1.500.000 euros.

Es decir, la Comunidad de Madrid, presidida por Díaz Ayuso, pagó el triple del precio por el que fueron adquiridas originalmente estas mascarillas, vitales en los momentos más críticos de la crisis sanitaria en España para evitar la propagación del COVID-19. En concreto, Priviet Sportive pagó 480.170,30 euros por comprar 250.000 mascarillas FFP2, otros 76.871 euros por trasladarlas hasta nuestro país y 6.501 euros por llevar todo este material sanitario hasta IFEMA, espacio habilitado como almacén durante la primera ola de coronavirus.

En el decreto de archivo de la causa se detalla una primera operación de compra de mascarillas tipo N95-FFP2 por valor de 332.906,53 euros; una segunda compra por valor de 124.382,66 euros por el mismo producto y una tercera por valor de 21.949,88 euros -en este caso, la Fiscalía precisa que "estas mascarillas no se corresponden con las contratadas por la Comunidad de Madrid"-. La suma de toda esta operación fue de 479.239,07 euros. A ello se le suma un importe de 76.871,13 euros por el transporte aéreo de las mascarillas hasta nuestro país.

Entre los días 17 y 20 de abril de 2020 se recibieron las remesas de mascarillas, y Priviet Sportive emitió dos facturas por valor de 4.917,97 euros y 1.583,27 euros por el traslado de esas mascarillas al Pabellón 10 de IFEMA, quedando sellada la "recepción provisional a falta de comprobación" por el Servicio Madrileño de Salud en el Hospital IFEMA. En el escrito se matiza: "El exceso en el importe obedece a que con esta transferencia PRIVIET abonó también el transporte de otra partida de mascarillas que donó a distintos ayuntamientos, a un hospital y a una parroquia y el despacho de unos test clínicos".

En esta línea, se especifica que la Unidad de Apoyo de la IGAE, adscrita a la Fiscalía, consultó en la Plataforma de Contratación del Sector Público "otros contratos de suministros de mascarillas FFP2 del Servicio Madrileño de Salud celebrados por el mismo órgano de contratación entre el 13 de marzo y el 30 de abril de 2020 y por importe superior a 100.000 euros", tras lo cual concluyeron que, "de los 37 contratos obtenidos bajo estos parámetros de búsqueda, el celebrado con Priviet fue el que tiene el cuarto precio por mascarilla más elevado".

El papel de Tomás Díaz Ayuso en la operación

Fue ya casi dos meses después, el 27 de junio de 2020, cuando Priviet, según el documento de Anticorrupción, percibió "el pago de las mascarillas mediante una transferencia por importe de 1.512.500 euros ordenada por la Administración General de la Comunidad de Madrid". En esta línea, Tomás Díaz Ayuso, hermano de la presidenta al que Priviet Sportive requirió sus servicios para hacerse con las mascarillas, se embolsó 234.103 euros a través de cuatro facturas con el concepto "comisión comercial": tres de ellas por valor de58.300 euros y la última por 59.203 euros.

"La comisión percibida por el Sr. Díaz Ayuso corresponde, en una parte -175.000 euros-, a los trabajos realizados para Priviet en relación con distintas ofertas, entre ellas la analizada; y, en otra parte -59.203,52 euros-, al bonus pactado por la obtención del contrato de las mascarillas con la Comunidad de Madrid", se añade en el decreto de archivo hecho público este jueves, en el que además se apunta que, con la investigación practicada, no se ha puesto de relieve "elemento indiciario alguno de que D. Tomás Díaz Ayuso llevara a cabo actuaciones, diligencias o gestiones tendente a conseguir un trato de favor para la empresa Priviet".

Así se recoge en el escrito: "En el mes de marzo de 2020, consciente Tomás Díaz Ayuso de la creciente demanda de suministro de material sanitario, especialmente de protección, que las compañías dedicadas a su fabricación y comercialización no alcanzaban a atender y de la difícil situación de Priviet, por la relación de amistad con su propietario y administrador único, Daniel Alcázar Barranco, le propuso a este una oportunidad de negocio consistente en que Priviet aprovechara su experiencia y capacidad logística y financiera para realizar importaciones del mercado asiático".

A esta compraventa de mascarillas aportaba Tomás Díaz Ayuso, según se apunta en el derecho de archivo, su "conocimiento de la gestión sanitaria y del mercado sanitario, de los proveedores y clientes potenciales, así como de las calidades y especificaciones de los productos demandados". Posteriormente, en ese mismo documento, se constata que "Tomás Díaz Ayuso elaboró un documento con 14 potenciales clientes, entre ellos la Comunidad de Madrid y Castilla y León".