En un auditorio lleno de jóvenes socialistas, Pedro Sánchez ha hecho un discurso ilusionante. Ha hecho promesas sobre trabajo y educación, precisamente para este colectivo. Ha dicho que si gobierna el PSOE va a trabajar duramente para acabar con las desigualdades sociales.

También contra la corrupción, ha dicho que va a sacar tarjeta "roja directa" a todo aquel que esté implicado en casos de corrupción. También ha cargado contra Mariano Rajoy y Artur Mas, al decir que están más preocupados en gobernar por la familia del PP y la familia Pujol recaudando el 3%.